Iglesia Bíblica Torre Fuerte

Desorganización

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¿Cuántos negocios o personas conoces que por flojera, por inconstancia o por no ser diligentes con lo que tienen, quiebran o simplemente, se estancan?

Proverbios 6.6 dice “Tú, holgazán, aprende una lección de las hormigas. ¡Aprende de lo que hacen y hazte sabio!” (NTV)

El cuarto diagnóstico que el Dr. Larry, escribe como síntoma de la esclavitud en los negocios es la “Desorganización”. Él cita, Proverbios 10.4: “Los perezosos pronto se empobrecen; los que se esfuerzan en su trabajo se hacen ricos”. (NTV)

Este autor nos pide que no justifiquemos el trabajo en exceso, ya que como lo vimos anteriormente, trabajar en exceso, no trae bendición. Más bien, se refiere a que todos debemos tener organizada la empresa. Ya sea que nosotros nos encarguemos de esa situación, o pongamos a alguien a hacerlo.

Él nos platica de la experiencia que tuvo un emprendedor haciendo filtros de aceite que retenían la suciedad, el éxito fue poco a poco incrementando, al punto de casi firmar un contrato con una de las compañías de autos, mas importantes de su estado. Sin embargo, la desorganización provocó un escándalo que ocasionó la cancelación de ese contrato y una demanda multimillonaria.

Resulta que para probar su invento, le pidió a una empresa de camiones que lo dejara probar sus filtros, la empresa accedió con algunos, y viendo el ahorro que conllevaba el invento, la empresa decidió que se les pusieran los filtros a todos los camiones de la compañía. El trabajo iba en aumento y desafortunadamente por acabar rápido, no se colocaron bien los filtros, se descompusieron varios motores y la empresa demandó. Este emprendedor, en su desorganización, había dejado de pagar su seguro, por lo que a cuenta de la deuda, le tuvo que dar a la empresa, la patente del invento.

¡Qué frustración!

Imagínate haber dedicado la mayor parte de tu tiempo a algo que sería el parte aguas de tu vida financiera y de repente….tu falta de diligencia provoca que todo el éxito que llevabas, se esfume y se convierta en nada.

¿Cuánto tiempo te llevaría volver a empezar?

Este ejemplo no sólo nos advierte de la organización que debemos tener en los negocios, sino también en nuestra vida personal, por ejemplo: tu auto, ¿está asegurado?, ¿tienes cosas sin terminar?, ¿ya hiciste, tu testamento?

 

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